Hotel a Palau

Scopri Palau

Para aquellos que anhelan un paraíso para bucear o simplemente relajarse en playas de ensueño, la mejor época para ir a Palau es entre diciembre y abril. Durante estos meses, el clima es más seco y las temperaturas oscilan entre 27-30°C. Este es el período dorado para ver mantarrayas y tiburones, ya que las aguas están más claras.

Si quieres sumergirte en la cultura local, no te pierdas el Festival de la Cascada de Ngardmau. Este evento te permite sumergirte en la vida y las tradiciones de Palau, incluyendo danzas típicas, comida y artesanía. Ten en cuenta que los precios tienden a subir durante la temporada alta, especialmente en hoteles de categoría superior. Para conseguir una buena oferta, se recomienda reservar al menos seis meses de antelación.

Si prefieres tranquilidad y quieres evitar las multitudes, considera viajar entre mayo y noviembre. Aunque es más probable que te enfrentes a la lluvia, los precios suelen ser más bajos y hay una mayor disponibilidad en los hoteles.

Para obtener las mejores ofertas en vuelos y hoteles en Palau, la clave está en la planificación. Reservar con 6 a 8 meses de anticipación garantiza disponibilidad y precios más bajos, especialmente si planeas viajar durante la temporada alta entre diciembre y abril.

Dado que Palau es un destino preferido para el buceo, hay hoteles que ofrecen paquetes que combinan alojamiento y buceo. Es recomendable considerar estas opciones para ahorrar dinero. Además, viajar en grupos pequeños puede brindarte acceso a descuentos en actividades como el buceo o los tours.

Si buscas una experiencia más exclusiva, los resorts de lujo suelen tener ofertas especiales fuera de la temporada alta, específicamente entre mayo y noviembre, cuando hay menos demanda.

Palau es conocido por su espectacular buceo, pero tiene mucho más que ofrecer. En Jellyfish Lake, puedes nadar junto a medusas no venenosas en un entorno casi mágico. Sin embargo, hay lugares como Crocodile Lake donde, a pesar de su atractivo, no se recomienda nadar, pero es un lugar ideal para observar la rica biodiversidad de la zona.

Si prefieres actividades en la superficie, el kayak es una excelente opción. Explora manglares y aguas cristalinas repletas de vida marina sin bucear. Además, hay numerosas islas deshabitadas a las que puedes acceder en barco, perfectas para un día de sol y playa al estilo de Robinson Crusoe.

Si te interesa la historia y la cultura, Bai Village es una visita obligada. Allí aprenderás sobre la arquitectura tradicional y obtendrás una perspectiva más cercana de la vida y las tradiciones locales. A lo largo del año, Palau celebra diversos festivales culturales en los que puedes sumergirte en la esencia del lugar.

Por último, no puedes irte de Palau sin probar su gastronomía. Te invito a degustar el fruto del árbol de nuez de betel y el taro, dos sabores locales que te sorprenderán. En Palau, hay experiencias para todos los gustos.