Hotel in Estonia

Scopri Estonia

Per immergerti completamente nella cultura e nella bellezza naturale dell'Estonia, l'estate è senza dubbio il periodo ideale. Da giugno ad agosto, le temperature variano dai 19 ai 21°C, offrendo un clima piacevole. Le giornate sono così lunghe che sembra che il sole non voglia tramontare, un fenomeno noto come le notti bianche. È il momento perfetto per esplorare città come Tallinn o Tartu, o avventurarsi nei parchi nazionali come Lahemaa. Inoltre, in estate si celebra il Festival del Cinema di Parnu, un evento imperdibile per gli amanti del cinema documentario.

Se preferisci un viaggio più economico e meno affollato, sia la primavera che l'autunno sono stagioni magnifiche. Le temperature sono più fresche, ma questo viene compensato da prezzi più accessibili per i voli e l'alloggio. Durante la primavera, i paesaggi si adornano di fiori e verde, mentre in autunno le foglie offrono uno spettacolo di tonalità ocra e dorata.

E per coloro che cercano esperienze uniche, l'inverno estone presenta il meraviglioso fenomeno delle Luci del Nord. Tuttavia, devi essere preparato a affrontare il freddo, poiché le temperature possono raggiungere i -10°C. Tuttavia, contemplare il cielo illuminato da quei colori magici vale la pena indossare un cappotto extra.

En Estonia, es beneficioso reservar de 3 a 4 meses de antelación para acceder a las mejores tarifas y disponibilidad en hoteles. Los precios tienden a aumentar a medida que se acerca el verano, un período en el que el clima es más agradable y los festivales están en su apogeo.

Si buscas una experiencia más exclusiva, considera los hoteles boutique en Tallin. Aunque estos establecimientos son más pequeños, a menudo ofrecen atractivos paquetes fuera de temporada que incluyen servicios adicionales como visitas guiadas o cenas en restaurantes de renombre.

Por último, no olvides la opción de alojarte en hoteles en las afueras de la ciudad. Gracias a una eficiente red de transporte público, puedes acceder rápidamente al centro de la ciudad mientras reduces tus gastos.

Estonia, situada en el norte de Europa, combina tradición y modernidad de manera magistral. En el corazón de la nación, Tallin, la capital, te transporta a través del tiempo. Su casco antiguo, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, muestra calles empedradas y edificios medievales, mientras que el distrito de Telliskivi, con su atmósfera contemporánea y vibrante, destaca como el epicentro de la modernidad estonia, con cafés de diseño, galerías de arte y tiendas innovadoras.

Aunque Tallin capta la atención de muchos viajeros, Tartu, la segunda ciudad más grande, es considerada el alma cultural y educativa del país. Conocida por su prestigiosa universidad, esta ciudad se caracteriza por una atmósfera juvenil, festivales vibrantes y un notable arte callejero que realza sus edificios históricos.

Si buscas una conexión más cercana con la naturaleza, el Parque Nacional de Lahemaa es un verdadero refugio, con bosques misteriosos, marismas cubiertas de niebla y una costa rocosa que se extiende hasta el Mar Báltico. Por otro lado, para aquellos que prefieren relajarse al sol, Pärnu ofrece extensas playas y un ambiente relajante en la playa.

Para culminar tu viaje, la isla de Saaremaa es el lugar perfecto para desconectar del mundo. Con paisajes prístinos, antiguos molinos de viento y balnearios de barro terapéuticos, te garantiza una experiencia única en Estonia.